Hagamos un experimento psicológico rápido: Antes de seguir leyendo, piensa en toda la semana y elige un color para cada día. No analices por qué, simplemente elige el que te venga a la mente.
Lunes: Amarillo
Martes: Rojo
Miércoles: Naranja
Jueves: Verde
Viernes: Azul
Sábado: Blanco
Domingo: Una especie de híbrido entre morado y marrón
Si es así, enhorabuena, has escogido los mismos colores que yo. No hay un color específico para representar cada día, pero mucha gente elige algo vagamente similar. La psicología es bastante sencilla: el lunes comenzamos la semana con calma y los colores que asociamos con el estrés surgen cuando pensamos en la parte pesada de la semana. El jueves aparece el verde, porque empezamos a ver la línea de meta, y el viernes todo es como un cielo azul despejado.
El sábado es blanco porque quizá sea el paraíso. El domingo es interesante, el mío fue una combinación entre morado y marrón. Era como si mi cerebro no pudiera decidir si el domingo implicara diversión (morado) o preparación para una nueva semana (marrón).
Con los meses, sin embargo, hay un conjunto más fijo de colores. En realidad, hay dos. Debido a los paralelismos con la astrología, se conocen como colorstrología.
¿Qué es la colorstrología?
Es algo real. Bueno, más o menos. Se ha investigado mucho sobre la psicología del color y el efecto que puede tener en nuestro bienestar emocional. Sabemos que hay emociones que todos tendemos a sentir más o menos, dependiendo de la época del año. Es difícil reducirlas a una o dos por mes, pero la psicología tiene sentido.
Se mencionan diferentes esquemas cromáticos, pero a veces es difícil ver cómo se ha asignado un color concreto a un mes determinado, aparte de como técnica para vender libros o cuadros. He elegido éste porque ha evolucionado de forma más orgánica y parece basarse en la psicología.
Mentiría si dijera que no teníamos ningún interés en vender nada. Puede que no sea del todo una coincidencia el hecho de que ofrezcamos consejos sobre cómo llenar tu armario, así como todo lo que necesitas para llenarlo. La cuestión es que, aunque nadie puede decirte al 100% qué color encaja mejor con cada mes, merece la pena pensar en ello a la hora de decidir qué colores lucir cada mes.
Está demostrado que elegir qué color ponerse influye en el estado de ánimo, y captar esta sensación es esencial si vas a decidir qué prendas vender en tu tienda. Las estaciones son relevantes en este caso, por lo que nuestros colores del mes se aplican más a los climas templados del hemisferio norte. Echa un vistazo a la siguiente tabla de psicología del color y comprueba si estás de acuerdo.
Tabla de psicología del color
Mes | Colores |
---|---|
Enero | Blanco, azul claro |
Febrero | Rojo cereza, rosa |
Marzo | Verde Esmeralda, morado |
Abril | Amarillo pálido, verde hierba |
Mayo | Crema, lila |
Junio | Naranja pálido, perla |
Julio | Coral, amarillo |
Agosto | Rojo quemado, naranja |
Septiembre | Óxido, azul brillante |
Octubre | Granate, añil |
Noviembre | Marrón, dorado |
Diciembre | Verde bosque, rojo oscuro |
Colores de cada mes
Veamos cómo se ha asociado cada mes con estos colores, la psicología que hay detrás y cómo puedes aprovecharlo.
Enero: Blanco, azul claro
El blanco es el color de la inocencia, y aunque no nos sintamos inocentes el 1 de enero, es algo que muchos de nosotros nos esforzamos por recuperar a lo largo del mes. Simboliza un nuevo comienzo y un momento para pensar en las posibilidades del año que empieza. También es el color de la nieve, que a menudo aparece en enero. El azul claro es una extensión de estas ideas, ya que representa un cielo despejado para el nuevo año.
El rojo y el rosa representan el amor y la pasión, así que probablemente el Día de San Valentín tenga algo que ver con estas asociaciones, ya que febrero es el mes del romance. Estos colores también representan la emoción. Puede que febrero no parezca el mes más emocionante, pero me gusta pensar que es un momento para añadir conscientemente algo de energía a nuestras vidas, después del malestar de enero.
Marzo: Verde esmeralda, morado
El verde es un color común en marzo. Simboliza el crecimiento tras el invierno, y a menudo tenemos la imagen de brotes verdes abriéndose paso entre la nieve. Este color también representa la frescura y la prosperidad. El morado representa las plantas que florecen y la inspiración. La primavera no llega realmente hasta finales de marzo, pero puedes utilizar la ropa para provocar el cambio de estado de ánimo un poco antes.
Abril: Amarillo pálido, verde hierba
Marzo y abril tienen algunos puntos en común, ya que el comienzo de la primavera (meteorológicamente hablando) puede coincidir con cualquiera de los dos meses, al igual que la Semana Santa, que representa el renacimiento. Abril es el comienzo de la verdadera primavera. Vemos más crecimiento, optimismo y sol, y los colores del mes lo encarnan. Los días son más cálidos y largos, de modo que nos apetece vestir colores frescos y salir al aire libre.
Mayo: Crema, lila
El crema y el lila de mayo completan los colores de la primavera. Las flores están en plena floración, el crema representa el sol cuando todavía está un poco nublado. Estos colores destilan comodidad, calma y tranquilidad, mientras nos tomamos un respiro entre la emoción del comienzo de la primavera y las posibilidades del verano que se avecina.
Junio: Naranja pálido, perla
Junio es el comienzo del verano, los niños empiezan o acaban el colegio (dependiendo de dónde seas), es el mes del orgullo y el Mundial de fútbol empieza en junio. El naranja señala la introducción de los colores más atrevidos del verano, pero es pálido porque acabamos de empezar. El perla procede de la piedra preciosa del mismo nombre, la piedra de nacimiento de junio.
Julio: Coral, amarillo
Con el verano a pleno rendimiento, llegan los colores vibrantes de julio. El sol está en su máximo esplendor, y este mes es sinónimo de diversión y entusiasmo. Vestir estos colores puede transmitir esta energía, optimismo y felicidad a los demás, así como a ti mismo. Alegra tu armario y comprueba que también te ilumina a ti.
Agosto: Rojo quemado, naranja
Piensa en bonitos atardeceres y probablemente los colores que te vengan a la mente sean el rojo y el naranja. Estos colores del mes representan el calor de agosto, y también son una señal de que nos acercamos al otoño. El naranja y el rojo también simbolizan la abundancia y la alegría, dos cosas que van de la mano, y que son comunes a agosto.
Septiembre: Óxido, azul brillante
El óxido continúa con el calor del verano que se convierte en otoño. También empezamos a ver cómo las hojas cambian de color, lo que ayuda a coordinar los colores al caminar por la calle. El azul brillante es la versión postveraniega del azul pálido de enero y representa un nuevo comienzo con la vuelta al cole. También es el color de la piedra natalicia de septiembre: el zafiro.
Octubre: Granate, añil
A medida que los días se oscurecen, también lo hacen los colores. Pero eso no significa que tengan que ser más deprimentes. El granate y el añil son colores hermosos que pueden mantener a los que te rodean en un estado de ánimo positivo a medida que nos acercamos al invierno. Estos colores representan la reflexión, la tranquilidad y el misterio. Tal vez sea un momento de reflexión entre el verano y la temporada festiva.
Noviembre: Marrón, dorado
El marrón nos indica que estamos en pleno otoño y representa el refugio, porque quizá queramos retirarnos un poco antes de todas las festividades. El dorado evita que nos deprimamos demasiado y ayuda a introducir el comienzo de la temporada festiva, con Acción de Gracias. Juntos crean un efecto acogedor que nos ayuda a permanecer cálidos, aunque sólo sea psicológicamente.
Diciembre: Verde bosque, rojo oscuro
No es difícil adivinar qué ha inspirado estos colores. Diciembre se centra sobre todo en la Navidad, una época tan especial que nos mantiene positivos durante todo el invierno. La combinación de verde y rojo es una forma estupenda de animarte a ti mismo y a los demás desde el principio del mes y, por supuesto, de aumentar el espíritu navideño cuando lleguen las fiestas.
Elige bien
El vestuario que elijas puede contribuir a mejorar tu estado de ánimo. También pueden ayudar a cambiar tu humor, si eso es lo que necesitas. Así que piénsatelo dos veces la próxima vez que cojas una camiseta, puede que te alegre el día. Para los minoristas, captar el estado de ánimo de sus clientes es esencial para abastecerse de los productos adecuados. Pero no siempre es tan sencillo como fijarse en lo que compran. A veces la gente aún no sabe lo que quiere y, si puedes averiguarlo antes que ellos, la ropa volará de tus estantes.
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